Ahora veo las pajitas con otros ojos

Fotos que saqué a mis bebidas con pajita en 2013, 2015 y 2016 (!)

Es impresionante la capacidad que tenemos de naturalizar las cosas, y lo terriblemente difícil que es el proceso de des-naturalizarlo cuando por fin abrimos los ojos. 👀

Tenemos la manía de sacarle fotos a lo que tomamos y comemos, y por eso ahora tengo estas fotos que documentan cómo antes no me molestaba tomar una bebida con pajita descartable. Era de lo más “natural”. Fotos de 2013, 2015 y 2016 (!)

Iba a un bar, pedía lo que tenía ganas de tomar, y disfrutaba mi bebida. Fin.🍹 . Ahora ya no puedo hacerlo, veo una pajita de plástico y me da un ataque, no sé explicarlo Jajajaja . ¿Pensaste alguna vez en la cantidad de pajitas que consumis por semana? Lo primero es empezar a verlo, y tomar noción.

Al principio empecé a pedir mis bebidas #sinpajitaporfavor, a veces pedía y me traían igual, otras veces la ponían y se la sacaban antes de llegar a la mesa porque se olvidaron… 🤔 . A veces yo me olvidaba de pedir y cuando llegaba el vaso con pajita, me sentía mal, y otras veces me pasó que me agarró por sorpresa (nunca imaginé que podía necesitar pajita para un vaso de agua) 😲

Quiero decir que no es fácil, y que ir contra la corriente requiere un esfuerzo adicional. Tenerlo presente cada vez que vas a tomar algo que puede venir con pajita… Acordarse de pedir, y que quién te atiende se acuerde y lo haga… No es el camino fácil y cómodo, seguro. 🙃

Pero pensando que una pajita más no hace nada, y que todos lo hacen, y que es difícil, y que, y que… Solo estamos. Poniendo excusas para seguir el status quo, seguir en la zona de confort, cómodos… . No pretendo que todos vayamos con una pajita lavable por ahí  voluntad propia (¡ni por obligación!… o si?) 😜

Pero sí creo que hay que buscar otras alternativas (ya empieza a haber algunas) y fundamentalmente ser #conscientes de lo ridículo e insostenible que es el circuito de las pajitas descartables: super masivas, extremadamente durables y muy dañinas a la fauna cuando terminan en el agua (y pasa mucho). Empecemos por cambiar la forma en que vemos lo que tomamos. Y por pedir #sinpajitaporfavor, que no es necesario siempre.

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